Por Miguel Florentino Jiménez.
Santo Domingo Norte, RD. – En la República Dominicana se ha legislado y se han aprobado muchas leyes desde el congreso, las cuales en un 90% no se cumplen en su totalidad, pues, cada quien escoge el pedacito que les conviene, eso mismo ha ocurrido con la ley de partidos políticos y la ley electoral, por tal motivo continuará y se generarán los mismos conflictos del pasado, esto está generando un cáncer a lo interno de dichas organizaciones.
Teníamos la esperanza de que grupos de perversos políticos desaparezcan de la actividad política pero nos equivocamos, las mismas mañas y patrañas del pasado quieren instalarse en este proceso electoral, más estamos todavía confiados de que un Líder político se case con la gloria y no permita que esto continúe.
En la vida cada acto negativo que hacemos tiene sus consecuencias y en ocasiones se expresa en las cosas que más nos afectan. Lamentablemente en la República Dominicana nos entretenemos en chácharas y en disparates, mientras los perversos trabajan en sus manipulaciones y su maquiavelismo, están en eso 24 horas al día.
Es cierto que la actividad política se trata de llegar al poder, pero todo en la vida debe hacerse dentro de los parámetros éticos y morales, hasta en la actividad política debe ser así, como dice un viejo refrán “lo mucho hasta Dios lo ve».
A estos políticos tradicionales les pasa cómo al loro viejo que por más que se esfuerza no aprende hablar, en el caso de ellos por más que quieran cambiar sus mañas no las dejan, pero deben saber que existen algunos que sí han aprendido a ver y no están dispuestos a dejarse engañar.
