Por: Sandy Cuevas
SANTO DOMINGO.- El estigma de nacer y vivir en un barrio como Herrera, que padece de caos vial, falta de servicios, frecuentes robos e incidentes de violencia, no ha sido un obstáculo para residentes de ese sector que también ha sido cuna de peloteros, artistas y de una de las zonas industriales más importante del país.
Lejos de la imagen negativa que tienen algunos sectores populares de Herrera, la solidaridad de su gente, la dedicación al trabajo y las ganas de superación es la esencia de sus habitantes.
Además, resaltan el valor de la Zona Industrial de Herrera, que genera miles de empleos directos e indirectos y es un importante aporte a la economía nacional.
Como muestra positiva del desarrollo de este barrio, pequeños y medianos empresarios dicen que ha mejorado la calidad de vida de sus familiares mediante el duro y constante trabajo.
También resaltan las grandes obras de infraestructura con las que cuenta este enclave, como el Hospital Marcelino Vélez Santana y el Metro.
Tanto los nativos de Herrera como los que llegaron hace algunas décadas, dicen sentirse orgullosos de vivir en el barrio.