El presidente de la República, Luis Abinader, anunció la noche de este domingo que el cierre total de la frontera con Haití, así como las otras medidas que tomó el Gobierno, continuarán hasta que se consiga «la paralización definitiva del canal de construcción» que se efectúa en el río Masacre del lado haitiano.
Las otras disposiciones del mandatario fueron la suspensión de la entrega de visas a ciudadanos haitianos, prohibición al país de la entrada de «los promotores del proyecto», reactivación de la toma de agua de La Vigía; la construcción de la presa de Don Miguel y el reforzamiento de «la presencia militar en toda la frontera«.
Dijo que su posición está acorde con la Constitución dominicana y con el Tratado de paz, Amistad y Arbitraje de 1929 firmado por las dos naciones.
También acotó que ni la República Dominicana ni Haití quieren la confrontación y atribuyó la construcción del canal a un grupo de particulares, que llamó incontrolables, y a los que acusa de «conspirar también contra la estabilidad de su gobierno y la seguridad de nuestros recursos hídricos».
«Y esto no se trata de un conflicto entre dos pueblos, porque ni el dominicano ni el pueblo haitiano queremos la confrontación; lo que han demostrado nuestros pueblos es el deseo de vivir en paz«, refirió en una alocución que dirigió a la nación dominicana.