

Arizona – Mientras los dueños de equipos y la MLB tratan de ponerse de acuerdo, los jugadores están ansiosos por estar en el terreno de juego, y uno de ellos es José Ramírez que dijo estar por loco por volver a jugar.
“Extraño estar con todos los muchachos, el equipo, somos como una familia por pasar tanto tiempo juntos. Extraño estar con ellos. Extraño estar jugando en el terreno y tener a los aficionados gritando en las gradas. Es algo que extraño mucho” el jugador que en LIDOM pertenece a los toros del este.
Antes de MLB suspender el inicio de la temporada de las Grandes Ligas, por motivo del coronavirus, el jugador se reportó en febrero a los entrenamientos de los Indians en Goodyear, en los suburbios de Phoenix y luego de la suspensión por el Covid-19 decidió entrenar en una instalación privada por dos meses en el complejo deportivo que Cleveland comparte con lo los Rojos de Cincinnati durante la primavera.
“Realmente es muy diferente, porque en el complejo no estamos tan preocupados por el coronavirus. Hay mucho cuidado, es muy diferente al lugar donde estaba entrenando”, dijo Ramírez. “También están las facilidades, un gimnasio muy bueno, los trainers trabajando con uno. Todo es mucho mejor”, apuntó.
Ramírez, de 27 años, se dejo sentir en el 2016 donde compitió por el premio de Jugador Más Valioso de la Liga Americana en 2017 y 2018, pero bateó .218 con 24 extrabases y un OPS de .652 en 84 juegos en la primera mitad del 2019. En la segunda mitad, no obstante, recuperó el toque y bateaba .327 con 34 extrabases y OPS de 1,105 cuando se quebró la mano derecha el 24 de agosto.
José Ramírez hiso sus declaraciones a ESPN Digital desde Arizona, donde conversó con Enrique Rojas.